domingo, 9 de diciembre de 2012

         LAS LEYES UNIVERSALES


Leyes - Ley de Polaridad


El Kibalyón nos dice: "Todo es doble; todo tiene dos polos; todo su par de opuestos: los semejantes y los antagónicos son lo mismo; los opuestos son idénticos en naturaleza, pero diferentes en grado; los extremos se tocan; todas las verdades son semiverdades; todas las paradojas pueden reconciliarse"
Este principio nos explica que los polos opuestos son exactamente lo mismo diferenciándose únicamente por su grado o vibración. Por ejemplo: el odio y el amor, el blanco y el negro, el bien y el mal. Ambos son lo mismo, solo que uno es positivo y el otro negativo. Son lo mismo, con diferente vibración ó graduación.
Podemos poner el ejemplo de un termómetro, el cuál tiene una línea de graduación, si lo sumerges en agua caliente el termómetro subirá, si lo sumerges en agua helada, bajará, al final te está señalando solamente la temperatura con diferente valor.
Veámoslo de otra manera:
Si pones en un extremo al color negro y en el otro extremo al color blanco, te darás cuenta que la mezcla de ambas forman una gran variedad de tonos de grises... te darás cuenta que el negro y el blanco son lo mismo, pero con distinto matiz.
De igual forma, todas las emociones, pensamientos o actitudes tienen su negativo y positivo, por ejemplo: El miedo y el valor, el amor y el odio, la alegría y la tristeza, la intolerancia y la tolerancia, el rencor y el perdón, mentira y verdad... etc. Al ser lo mismo se puede transformar o cambiar.
Cuando decimos "cambiar", realmente nos estamos refiriendo a TRANSMUTAR, es decir, trasladar nuestra parte negativa a la positiva. No podemos borrar el negativo porque si borramos el negativo, estaremos borrando también a su positivo. Por eso no se elimina sino se transforma.
Cuando nos situamos por mucho tiempo en la polaridad negativa, esto cambia totalmente nuestra perspectiva de vida. Tomando el mismo ejemplo de amor-odio, si vivo instalado en el odio o los resentimientos, mis experiencias de vida me dirán que "nadie me quiere" "todos me buscan para hacerme daño" "nadie me valora ni me aprecia" "mis relaciones se rompen" "Sufro de soledad" etc.

Publicado por Harumi Puertos en 20:30 0 comentarios  
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Leyes - Ley de Vibración





El Kibalyión nos dice: "Nada está inmóvil; todo se mueve; todo vibra."
Todo vibra y todo se mueve, desde el TODO, que es espíritu, hasta nuestros pensamientos y nuestros cinco sentidos. Las moléculas, los átomos, nuestras células, están en continuo movimiento. La cantidad de estos movimientos,
marcará la calidad de la vibración. Si es rápida es positiva, si es lenta será negativa.
La diferencia entre las diferentes manifestaciones de la materia, de la mente y el espíritu, radica en su tipo de vibración. Desde el plano más elevado hasta la más densa materia.
Por ejemplo:
Un pensamiento negativo (en una escala del 1 al 10) vibrará de 1 a 5 movimientos por segundo, en cambio un pensamiento positivo estaría vibrando entre los 6 a los <!--[if !supportEmptyParas]-->a10 movimientos por segundo. Haciendo una analogía, podríamos comparar la frecuencia vibratoria con el giro de las aspas de un helicóptero, mientras más lento gire, percibimos el número de aspas que tiene, mientras más rápido gire, perdemos esta ubicación hasta que se pierdan a nuestra vista.
Cuando nosotros optamos por pensar y actuar negativamente, estamos manteniendo una constante baja vibratoria. Sentimientos como el odio, el rencor, la envidia, la tristeza, el dolor, la corrupción, etc. Bajan nuestra vibración. El amor es la energía de más alta vibración.
De igual forma, en nuestro planeta, en esta dimensión, alternamos con muchos seres y entidades que no vemos a simple vista. Si a tu lado se encuentra un ángel, su calidad vibratoria es tan fina y rápida, que no es posible percibirlo mediante el sentido de la vista ya que nosotros tenemos una vibración más baja. Si nosotros hacemos mucho trabajo interior y trabajamos mucho con el amor y transmutamos nuestra negatividad, es posible elevar tanto nuestra vibración hasta poder alternar concientemente con otras entidades de la misma vibración... en este caso, nuestra comunicación con los Ángeles se haría efectiva, directa y conciente.
La única forma de elevar nuestra vibración es por medio del cambio de conciencia, transformando nuestras creencias y pensamientos al positivo, liberándonos de negatividad y vivir regidos por el amor en su más pura esencia.

Publicado por Harumi Puertos en 20:29 0 comentarios  
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Leyes - Integrando


Como podrás ver todo vibra y los pensamientos y sentimientos vibran también. De este modo, todo lo que piensas, sientes y haces tiene una vibración determinada ¿Como podemos integrar la polaridad y su vibración a nuestra vida cotidiana?.

Puedes iniciar con el siguiente ejercicio, tómalo como sugerencia y ejemplo para polarizar todo lo que tu deses.

Dedica un día a observar a la gente de tu alrededor. La que está en tu casa, la que convive contigo en tu trabajo, y toda persona que no conoces, la que pasa enfrente de tu ventana, la que va en el coche de a lado o la que compra un refresco en la tienda. Obsérvalas.

Obsérvalas como a seres humanos igual que tu... que aman... que tienen miedos y culpas... que al igual que tu, hacen lo mejor que pueden en este momento, que al igual que tu buscan un rayo de luz, una esperanza y una forma de realizarse en la vida.

Observa a la gente de tu alrededor... ve a través de la máscara y la careta... ve más allá de una sonrisa que esconde el dolor o la violencia que esconde el miedo... ve a través de las apariencias y observa, como dentro de cada persona, hay un ser igual que tu... con su lado obscuro y su lado de luz, con sus aciertos y tropiezos... con sus deseos de una vida mejor.

Después de terminar este largo ejercicio (te llevará tiempo observar a tanta gente) obsérvate a ti mismo ¿que cambió en ti?. Es posible que tengas una perspectiva diferente de la gente a la cuál le temías o criticabas, es posible que haya cambiado tu concepto acerca de la gente que considerabas prepotente o iracunda... es posible que hayas cambiado de actitud y en lugar de imponer tus ideas a quien necesita ayuda, le tiendas la mano ahora de forma tolerante y amorosa... es posible que se haya desarrollado más el amor y la compasión en ti para con tus semejantes.

¿Te das cuenta? has polarizado ya tus sentimientos, pensamientos y actitudes... no solo ha cambiado tu perspectiva del mundo sino también el mundo ha cambiado su perspectiva de ti.

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